El Jockey Club del Perú fue escenario de uno de los conciertos más esperados sobretodo para los enamorados y románticos que viven del sentimiento más hermoso que tiene el hombre, el amor.
Justamente eso era lo que nos traía este concierto y los encargados de entregarlo eran dos grandes representantes de la música romántica, uno de ellos era Pablo Herrera, quien se presentaba en nuestro país tras algunos años de ausencia. El cantante chileno se encargó de abrir la velada romántica interpretando sus mayores éxitos como “tengo un amor”, “te prometo”, “escucha bien tu corazón”, los cuales eran coreados desde principio a fin por todo el público, en su mayoría femenino, que se había dado cita esa noche en el Jockey Club.
Además, Pablo Herrera en su presentación estuvo acompañado por su hermano y tecladista Jorge Herrera, que también recibió fuerte aplausos de la concurrencia. Con “tan vulnerable” de su más reciente álbum “Antología” que pronto saldrá a la venta en el Perú, Pablo Herrera se despidió de sus fanáticas y al final agradeció a todos por las muestras de cariño que ha recibido cada vez que ha pisado suelo peruano. La noche empezaba hacerse más fría, pero eso al público no le importaba con tal de ver a ídolo lo más cerca posible y el momento esperado llegó.
Las luces se apagaron y los sonidos instrumentales comenzaban a encenderse hasta que entró Franco de Vita y la multitud estalló de emoción. “Gracias por estar aquí, Lima” fueron sus primeras palabras de introducción a las que el respetable respondió con aplausos. Con la misma energía y carisma de siempre, el cantautor italo – venezolano endulzó con su voz a todas sus fans que lo estuvieron esperando por muchos años. Pero la espera valió la pena, pues el show que realizó fue de un alto nivel musical, las luces y sonido impecables, acompañado de una orquesta que se llevó un merecido reconocimiento por su destreza el escenario.
Justamente eso era lo que nos traía este concierto y los encargados de entregarlo eran dos grandes representantes de la música romántica, uno de ellos era Pablo Herrera, quien se presentaba en nuestro país tras algunos años de ausencia. El cantante chileno se encargó de abrir la velada romántica interpretando sus mayores éxitos como “tengo un amor”, “te prometo”, “escucha bien tu corazón”, los cuales eran coreados desde principio a fin por todo el público, en su mayoría femenino, que se había dado cita esa noche en el Jockey Club.
Además, Pablo Herrera en su presentación estuvo acompañado por su hermano y tecladista Jorge Herrera, que también recibió fuerte aplausos de la concurrencia. Con “tan vulnerable” de su más reciente álbum “Antología” que pronto saldrá a la venta en el Perú, Pablo Herrera se despidió de sus fanáticas y al final agradeció a todos por las muestras de cariño que ha recibido cada vez que ha pisado suelo peruano. La noche empezaba hacerse más fría, pero eso al público no le importaba con tal de ver a ídolo lo más cerca posible y el momento esperado llegó.
Las luces se apagaron y los sonidos instrumentales comenzaban a encenderse hasta que entró Franco de Vita y la multitud estalló de emoción. “Gracias por estar aquí, Lima” fueron sus primeras palabras de introducción a las que el respetable respondió con aplausos. Con la misma energía y carisma de siempre, el cantautor italo – venezolano endulzó con su voz a todas sus fans que lo estuvieron esperando por muchos años. Pero la espera valió la pena, pues el show que realizó fue de un alto nivel musical, las luces y sonido impecables, acompañado de una orquesta que se llevó un merecido reconocimiento por su destreza el escenario.
Franco hizo un viaje a través del tiempo para interpretarnos todas las canciones de su basta discografía que lo han llevado al éxito y ha ganar varios premios por su trayectoria musical. Los momentos más recordados del concierto sin duda fueron, primero cuando cantó a dúo con Pablo Herrera “Te veo venir soledad” y luego cuando invitó al escenario a los pequeños César, Franklin y Diego a quienes conoció en el programa “Lima limón”, con ellos cantó “El tiempo que nos queda por vivir”, la interpretación arrancó gritos y aplausos efusivos para los futuros cantantes.
Para el final, Franco de Vita dejó uno de sus grandes temas que se ha convertido como un himno en estos 25 años de carrera musical, con “No basta” cerró esta noche hermosa llena de amor y romanticismo que sus fanáticas esperan pronto vuelva a repetirse.