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ÚLTIMAS FUNCIONES PARA VER EL HOMBRE ELEFANTE.



Obra se presenta de jueves a domingo a las 8:00 pm en el Teatro “Mario Vargas Llosa”. Las entradas las pueden adquirir en los módulos de Teleticket.

La obra “El Hombre Elefante” se acerca a su fin, solo quedan siete funciones para ver la pieza dramática basada en la vida de Joseph Merrick que ha tenido muy buena convocatoria del público y buenos comentarios en las redes sociales. Esta maravillosa obra se presenta en el Teatro Mario Vargas Llosa en la Biblioteca Nacional, hasta el 04 de agosto.

El montaje es dirigido por Joaquín Vargas y cuenta con la participación de un destacado reparto de artistas nacionales: Hernán Romero, actor de amplia trayectoria en cine, tv, y teatro, reconocido y condecorado recientemente por el Congreso de la República del Perú, Mónica Domínguez, Sebastián Reátegui, Enrique Urrutia, Miguel Vargas, Jerry Galarreta, Jaclyn Ancani, Jorge Bardales, Gonzalo Talavera, Gabriela Alcántara, Rosario Zevallos, Jürgen Gómez.

La obra ha recibido el reconocimiento de la crítica internacional y actualmente se presenta en diversos teatros del mundo. Entre los reconocimientos figuran: Premio Tony, New York Drama Critic's Award (por mejor obra de teatro), premio Obie Award (mejor obra de teatro) y el Drama Desk Award (mejor obra de teatro).

La obra transcurre en Londres y Bélgica entre los años 1884 y 1901 y está basada en la vida de Joseph Merrick y su relación con el Médico Frederick Treves quién lo toma a su cargo con un interés científico. Merrick, con un severo caso de neurofibromatosis y el Síndrome de Proteus, nació con esta deformidad, lo cual lo llevó a trabajar en ferias como parte del espectáculo de fenómenos en Londres.

En aquella época a este tipo de gente los trataban como monstruos de feria y Merrick vivía como un animal, rebajando su concepción de ser humano, exponiéndoles para la burla, el escarnio, la repulsión y el rechazo de los espectadores, eran explotadas y ellas lograban un mísero salario. John Merrick tenía todo para haberse convertido en una persona miserable por dentro y resulta que en ese caparazón terrible habitaba un ser exquisito en bondad, generosidad y ganas de vivir por lo que el hombre elefante habla de la dignidad humana.
“¡No soy un animal! ¡Soy un ser humano! ¡Soy una persona!” son reclamos que con dolor hace el personaje central de la versión del drama, Joseph Merrick. Este grito de humanidad es el llamado que trasciende a nuestros días, la exposición de personas con defectos o enfermedades para conmover y obtener algún beneficio propio.